IMPORTANCIA DE VALORAR EL FÓSFORO EN LOS SUELOS AGRÍCOLAS

El fósforo (P) es el segundo macro elemento de mayor importancia para las plantas, después del nitrógeno, el más importante. Las plantas deben tener cantidades suficientes de P para cumplir con  su ciclo normal de producción, ya que influye en el crecimiento radical, pronta madurez, formación de semillas e incrementa la resistencia a enfermedades. Sin embargo, muchos productores desconocen las ventajas de monitorear este nutriente. Algunos utilizan medidores sencillos cuyo sesgo es demasiado alto debido al método en que se basan. Lo ideal es hacer un análisis de suelo, preferentemente antes de comenzar el ciclo de cultivo.

Desde el punto de vista de los expertos en agricultura, el crecimiento inicial  de la planta debe ser vigoroso y rápido (Figura 1.1), para que la planta establezca su sistema radical firme y disminuya los efectos adversos  como lo puede ser los periodos de sequía, presión de insectos, malezas, etc.

Por ello, es muy importante que existan altas cantidades de ambos elementos y que sean disponibles para las plantas. Por ejemplo, el amonio (NH4+) afecta en la disponibilidad y absorción del P. La solubilidad indica que tan disponible es el P para la planta, reducir el pH del suelo permite la descomposición de los materiales arcillosos y consecuentemente la liberación de Al+3 y Fe+3. Estos precipitan y por ende disminuye su disponibilidad. El pH entre 6.0 y 7.0 es el rango para que el P sea más soluble y disponible.

El segundo punto clave para tener éxito en la producción es saber identificar e interpretar los datos de un análisis de suelos. En algunas ocasiones se confunden los compuestos provenientes del P y no se sabe cuál es el que aprovecha la planta realmente. Es bien sabido que la planta absorbe la mayoría del P a partir del ion ortofosfato primario (H2PO4-) y pocas cantidades mediante el ion ortofosfato secundario (HPO4=). “El P elemental es químicamente muy reactivo y por esta misma razón no está presente en su estado puro en la naturaleza” (1). Generalmente, el P proviene de la meteorización de la apatita, un mineral rico en P y Calcio (Ca). Sin embargo, el P es soluble en el suelo independientemente de la fuente que provenga, ya sea de apatita, fertilizante, estiércol o materia orgánica. Otras fuentes de P disponible incluyen el humus, los microorganismos y otras fuentes de vida.

De lo anterior se desprende que análisis de suelo (Figura 1.2) tiene alcance a largo plazo, generalmente es solicitado para fines de fertilidad. Específicamente el análisis con relación a P es conveniente, debido a que el P se mueve muy poco en la mayoría de los suelos por lo cual puede perdurar por un largo periodo. Generalmente, el P  se mantiene en el lugar que fue colocado, difícilmente se pierde por lixiviación. Únicamente la erosión y la remoción del cultivo son las dos  formas significativas de pérdida de P del suelo.

Métodos empleados para la determinación de P en el análisis de suelo

La mayoría de los laboratorios de suelos emplean las metodologías espectrofotométricas de Bray-Kurtz y Olsen para determinar el P, ambas generan resultados buenos, que son reproducibles, exactos, confiables y adecuados para la determinación de P, al mismo tiempo cumplen los requerimientos necesarios ante los laboratorios de ensayo. Estos métodos analíticos son precisos. Efectuados cualquier día, diferente analista y cualquier muestra a diferentes concentraciones, deben proporcionar valores confiables. La concordancia entre los resultados de las pruebas son muy certeras, por lo que se consideran buenos métodos. Los laboratorios más sofisticados emplean ambos métodos, dependiendo de las características de la muestra y su origen.

Independientemente cual sea el método que se aplique, se debe tomar en cuenta que es muy necesario monitorear el P, ya que debe estar a como dé lugar disponible para la planta. Se ha demostrado que la deficiencia del P a la mitad del ciclo de crecimiento reduce el potencial de producción drásticamente. Lo cual repercute en las ganancias del productor e inclusive puede llevar a pérdidas severas.

Es muy importante acudir a laboratorios confiables para el análisis de su muestra de suelo, para que los resultados representen realmente la composición del suelo. Algunos análisis inclusive brindan información extra, dando recomendaciones respecto al manejo nutricional. En México hay variedad de laboratorios especializados en este tema, Fertilab es uno de ellos, muy confiable en los análisis de suelo, principalmente por tres factores: Su personal altamente capacitado, los equipos de precisión utilizando tecnología de punta y la metodología más actualizada.

El personal en cualquier organización es el recurso más importante, capacitarlo y actualizarlo promueve hacer un trabajo con mejor calidad.

Los equipos de laboratorio necesitan personas que tengan conocimientos especializados para que puedan manejarlos de forma segura y correcta. Por eso, el fabricante Tecnal (Figura 1.3) invierte continuamente en desarrollo e innovación de sus equipos para que sean compactos y fáciles de usar. Además, Tecnal fabrica sus equipos con material de calidad lo cual evita la contaminación en la muestra y aplica tecnologías de punta para optimizar sus productos, brindando la confianza a los analistas desde la operación de los equipos, así como reducción de tiempos y su alta eficiencia.

Los mejores laboratorios de suelos implementan metodologías actualizadas para que sigan permaneciendo como los mejores. Sin embargo, equipar un laboratorio de suelos no es una tarea fácil, pues los equipos requeridos son difíciles de encontrar y de alto valor. Por este motivo PROAIN hace su contribución,  mediante la distribución de TECNAL en México, ayudando a  robustecer los laboratorios de suelos brindando equipos especializados para tal fin.

En conclusión, es fundamental monitorear el P. Este se determina mediante un análisis de suelo, que de manera certera permita tomar decisiones al productor sobre la mejor manera de optimizar su cultivo. El P es de importancia porque las plantas requieren altos contenidos de los macronutrientes NPK. Sin embargo, no hay que menospreciar a los micronutrientes a pesar de que se requieren muy pocas cantidades, son igual de importantes que los otros. Y para checar estos micronutrientes es obligatoriamente necesario un análisis de suelo, en la actualidad no hay equipos portátiles que detecten a estos elementos de manera precisa. 

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BIBLIOGRAFÍA

[1] Potash & Phosphate Institute. MANUAL INTERNACIONAL DE FERTILIDAD DE SUELOS, 1978.

Por: Ing. Gerardo Granados 

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